Un golpe certero contra el crimen organizado asestaron las autoridades en Ibagué con la desarticulación de la banda delincuencial autodenominada "Los Fintas". Tras una exhaustiva investigación de diez meses liderada por el Gaula de la Policía Nacional, en coordinación con la Fiscalía 81 especializada, se logró desmantelar esta estructura criminal dedicada a la extorsión bajo la modalidad de falso servicio.
La paciente labor investigativa incluyó el desarrollo de 37 diligencias judiciales y de inteligencia, abarcando interceptaciones telefónicas, entrevistas cruciales, inspecciones técnicas y análisis de bases de datos de empresas de telefonía móvil. Este meticuloso seguimiento culminó en un operativo simultáneo en los barrios San Martín y Jordán 8va etapa, donde más de 50 uniformados irrumpieron en dos viviendas, logrando la captura de tres individuos señalados como los principales responsables de los delitos de concierto para delinquir con fines de secuestro extorsivo, porte ilegal de armas de fuego y hurto calificado y agravado.
Los detenidos fueron identificados como Juan David López Bocanegra, alias “el flaco”, de 22 años, quien ya contaba con antecedentes por violencia intrafamiliar y utilización de menores en actividades delictivas. López Bocanegra era el cerebro de la organización, encargado de establecer el primer contacto con las víctimas a través de redes sociales, utilizando anzuelos de venta de motocicletas a precios irrisorios. Una vez que captaba el interés de algún incauto, lo citaba en puntos apartados de Ibagué y del municipio de Alvarado.
Otro de los capturados es Nelson Enrique Ospina Galicia, de 35 años, aprehendido en la carrera 46 del barrio San Martín. Ospina Galicia registraba anotaciones judiciales por porte ilegal de armas, inasistencia alimentaria y estafa. Su rol dentro de la banda consistía en recoger a las víctimas cerca de los puntos de encuentro iniciales, simulando ser administrador o mayordomo de una finca, para luego trasladarlas a zonas rurales donde, junto con los otros miembros, las intimidaba con armas de fuego.
El tercer detenido es Ariel Herrera Osorio, de 51 años, cuya captura se produjo en la calle 74b del barrio Jordán 8va etapa. Herrera Osorio tenía antecedentes como indiciado por intimidación o amenaza con armas de fuego.
Dentro de la organización, su función era crucial para el transporte de las víctimas. Utilizaba su vehículo particular para recogerlas en áreas urbanas de Ibagué y conducirlas hasta zonas rurales, principalmente en el corregimiento de El Totumo.
La investigación se desencadenó tras la denuncia de una de las personas afectadas, lo que permitió a la Policía Nacional y a la Fiscalía especializada iniciar las pesquisas para identificar y capturar a los responsables de esta modalidad extorsiva que combinaba el engaño del falso servicio con la violencia de la intimidación y la amenaza para obtener ilícitamente sumas de dinero.
Las pesquisas revelaron que alias “el flaco” lideraba la estrategia de contacto a través de publicaciones engañosas en redes sociales. Tras ganarse la confianza de las víctimas, las convencía de dirigirse a lugares apartados donde eran interceptadas por otros miembros de la banda.
Una vez en zonas rurales de Ibagué y Alvarado, las víctimas eran sometidas con armas de fuego, llegando incluso a ser grabadas y fotografiadas para enviar evidencia a sus familiares y así ejercer mayor presión para el pago de rescates. Las retenciones se prolongaban entre 4 y 8 horas en áreas boscosas, tras lo cual las víctimas eran despojadas de sus pertenencias antes de ser liberadas. Se estableció que las exigencias económicas de "Los Fintas" variaban significativamente, oscilando entre los cinco y los cien millones de pesos.